EUROPA
PRESS
9 junio
2016
Las varices son una de las enfermedades con mayor prevalencia en
España, una de las 10 primeras, pero, a su vez, también son una de las 10
primeras con mayor lista de espera, según han informado el presidente del
Capítulo Español de Flebología y Linfología,
Fidel Fernández Quesada, y la jefa del servicio de Angiología y Cirugía
Vascular del Hospital de la Cruz Roja de Madrid, Lourdes Reina Gutiérrez,
durante el 62º Congreso Nacional de la Sociedad Española de Angiología y
Cirugía Vascular (SEACV).
Se trata de una patología
que padece el 30 por ciento de la población española tiene varices y que,
además, unos 20.000 pacientes están en lista de espera para poder operarse. Y
es que, a pesar de que no es una enfermedad que conlleve un riesgo vital, tiene
una evolución progresiva y puede presentar distintos grados de progresión.
Además, en las fases más avanzadas, la percepción de los pacientes de cómo
afectan a su calidad de vida es comparable a los ratios mostrados en patologías
como la EPOC, el infarto de miocardio o la insuficiencia cardiaca.
Respecto a esta
distribución variable de recursos, los expertos han asegurado que, al igual que
las listas de espera, las coberturas sanitarias son dispares, ya que algunas
comunidades autónomas sólo incluyen en su cartera de servicios esta patología a
partir de determinado grado de evolución o limitan la disponibilidad de
recursos por la edad o restringen en función de otras características como
sobrepeso, patología articular o asociación con otras enfermedades.
Alertan del modelo 'low cost'
"Esta insatisfacción
de las necesidades de los pacientes han aparecido oportunidades de negocio para
ciertos colectivos, que han instaurado un modelo 'low
cost'. Sin embargo, esta reducción de los costes es
conseguida disminuyendo la calidad, la seguridad y la preparación del
terapeuta. Así, personas con escasa preparación están haciendo terapias flebológicas, con escaso estudio pretratamiento y sin
ofertar al paciente, dentro del amplio abanico de terapéuticas, la que puede
ser más adecuada a la patología que presenta el enfermo y sin adecuarse a las
preferencias del médico y el paciente", han aseverado.
A su juicio, se está
produciendo un 'efecto rebote', en el que los pacientes, después de este tipo
de tratamiento vuelven al especialista con un cuadro peor, en muchos casos
porque no se realizó un análisis en profundidad para detectar si existía
patología subyacente o complicaciones.
Por este motivo, Fernández
y Gutiérrez han recordado que, aunque muchas especialidades tratan diversos
aspectos de la patología venosa, la única especialidad con competencia dentro
de su cartera de servicios que pueda englobar todos los aspectos de la flebología capaz de abarcar el conjunto de la prevención,
diagnóstico y tratamiento de las varices es la Angiología y Cirugía Vascular.